Por Jaqueton:
Tras decidir y pensar, pensar y decir… a ver dónde podríamos ir el domingo 5 de
abril…. Y de ver si yo podría o no podría salir ese día… Finalmente hubo
salida! Y se decidió acudir al 1er. Moto Almuerzo en Arc de Barà….!
Y como el horario era tan incierto como la ubicación del evento, se pensó en
quedar en LB2 a las 8:00 de la mañana, para tomar el cafetín tranquilamente… y
a eso de las 9:00, personarse por allí para disfrutar delo que potencialmente
sería un encuentro simpático y tranquilo, con un montón de buena gente…
Organizado todo ello, por los compañeros de Comancheros MC.
Aquella mañana, pues, me levanté tranquilo y sin prisas… que la hora de
encuentro no era demasiado temprana, y no requería de un madrugón muy
pronunciado… Aunque, como todos saben, eso no me preocupa en demasía… Ni a mí,
ni a ninguno de mis compañeros habituales de ruta, almuerzos y quedadas…
Me levanté… y tras comprobar que las predicciones para aquél día eran las de
una soleada y achicharrante mañana… Salí feliz al encuentro con mi pequeña y
dulce Bilú It. Cosa que la alegró sobremanera, pues desde que tengo el curro
nuevo –precisamente donde la guardo- no la cojo para nada… y la pobre pasa
largas temporadas sin mover su potente pistón…
Salí raudo para LB2. Tranquilo. Sin prisa alguna, y disfrutando del despunte
del día. Momento –para mí- más bonito del día para andar devorando kilómetros
de asfalto…
A la altura de Segur de Calafell, descubrí en mi retrovisor a otro motero… y
aunque los focos le delataron… no fue hasta que le pude ver las alforjas cuando
le saludé… chafándole así la idea –mala idea- de adelantarme y darme un
sustillo mañanero, motero y amistoso…. Je, je, je…. Era Fredy! El
incombustible, inefable e inconmensurable amigo Fredy….! Que me descubrió
frente a su proa, y al ver que yo también le había visto… se colocó en
formación, y así rodamos juntos hasta LB2. Primer punto de encuentro de aquella
mañana motera, que en principio tenía que ser soleada… pero que no apuntaba
manera alguna en ese sentido…
Llegamos pues, a LB2. Y al punto de aparcar nuestras burricas, descubrimos
allí, esperando, a nuestro compañero… el intrépido y valiente Moli. Que tras
aparcar a su Negra en el lugar de costumbre, decidió esperara allí nuestra
llegada inminente.
Correrían algo así como las 7:40 de la mañana, pero era bien sabido de todos,
que a los tres nos gusta llegar pronto… así que era evidente que no tardaríamos
en llegar…
Entramos al local, pedimos cafelotes, pillamos una mesa… y celebramos allí
luenga conversa, hasta que se hizo una hora más que prudente para salir hacia
la concentra. Donde nos teníamos que encontrar con nuestro viejo camarada
Jordi. Tarraconense, y recientemente feliz nuevo propietario de una burra, con
la que acompañarnos de nuevo en nuestras aventuras….
De camino hacia allí, pudimos saludar a un par de compañeros de Wanderers MG,
que circulaban en sentido contrario. Casi seguro, que hacia LB2, punto de
encuentro también de esa gente… y donde en más de una y de cuatro ocasiones,
hemos tenido el inmenso placer de coincidir…
La idea era llegar al evento sobre las 9:00… pero llegando a l’Arc de Barà,
descubrimos que allí no había cartelito alguno que indicara la ubicación del
acontecimiento…! Así que nos tiramos a la aventura, y como sabíamos que la cosa
se hacía cerca de la mar… pues para la playa que nos tiramos.
Justo antes, saludamos a otro motero que nos pareció que podía ser Jordi… pero
como ninguno paró, todos seguimos a nuestro ritmo en busca del lugar. Del
ansiado lugar…
Buscando, buscando, llegamos hasta el Roc de Sant Gaietà… Y como allí tampoco
encontramos ningún letrero que delatara evento motero alguno… decidimos volver
a la carretera, nuestra querida N-340, y desde allí volver a iniciar la
búsqueda…
Volviendo estábamos a la nacional, cuando nos volvimos a cruzar con el
misterioso motero que poco antes nos pareciera que era Jordi…. Y ciertamente lo
era!!
Paramos, nos abrazamos y saludamos como es debido, después de tanto tiempo…. Y
nos dispusimos a continuar con la indagación –infructuosa de momento- delpunto
exacto del primer moto almuerzo por aquellas heredades…
Buscando, buscando…. Dimos con una buena señora que nos indicó exactamente como
bajar hasta las playas de L’Arc de Barà… y aunque ella tampoco tenía constancia
de que por allí se celebrara ninguna concentración motera, nos dijo que solo
había dos playas a las que acudir: La del Roc de Sant Gaietà, y la que nos
indicaba ella… Así que, de no ser la primera –que sabíamos que no lo era- tenía
que ser por cojones la segunda…! Y para allí que fuimos los cuatro…
Los cuatro, los cuatro… Los cuatro jinetes del apocalipsis parecíamos….! Pues
andábamos ya desesperados en nuestra búsqueda de aquella concentra, de la que
por no saber, no sabíamos ni la hora a la que empezaba…
Llegamos al punto que nos indicó la buena mujer, y descubrimos a unos tipos al
lado de una burrica… Les saludamos, convencidos de que íbamos en buena
dirección. Pasamos el puente bajo la vía, llegamos a la playa, y por allí por
no haber, no había ni dios…!! Jué….. Vuelta por donde habíamos ido. Y a
preguntar a los tipos de la burrica a ver si ellos sí sabían donde era que se
hacía el encuentro…. Y sí…!!! Ellos sí supieron darnos razón!! Por fin….!!
Resulta, que no debíamos cruzar el puente bajo la vía…. Sino que llegando a él,
debíamos virar toda a babor, cogiendo una calle que discurría paralela a la
vía, en sentido – digamos- Barcelona… Y a unos centenares de metros, a mano
anarca, descubriríamos nuestra ansiada, esperada y buscada…. concentración
dominical….
Domingo, que dicho sea de paso, poco o nada tenía que ver con lo previsto en el
meteocat… pues de “sol que partiría las piedras”, nada de nada de nada, eh…?
Más bien hacía frío, y además el cielo tenía pintas de que en cualquier momento
se pondría a llover….
Pero bueno, volvemos a lo que estábamos…
Seguimos por la calle que nos habían indicado, y esta vez si, al llegar a cierta
altura… dirigimos nuestra mirada a nuestro siniestro lado…. Y sí!! Allí
estaba!!! La concentración!!!! Yuju!!!!
Ejem… Bueno Yuju…. Ejem, ejem…. De yuju, yuju, nada, eh….? Que aquello estaba
más vacío, que la cabeza de algunos que yo me sé… Aquello, si tenía que ser
algo, era más bien el embrión… el proyecto de una concentración…. Pues allí
había cuatro y el cabo.
Allí estaban los organizadores, montando el tinglado… tres tiendecillas de esas
de aperos moteros caretes… y con nuestras burras, apenas una docena de monturas
aparcadas en fila…
Y si a eso le sumamos, que las pintas eran de que empezara a llover en
cualquier momento… Imaginaos que plancha nos llevamos al llegar allí….
Pero bueno, nos fuimos a husmear las tiendas, donde a Fredy –archiconocido comprador-
lo recibieron haciendo la ola… je, je, je…. Nos dimos una vueltecilla por allí…
Y parecía que la cosa se iba animando.
Poco a poco, iban llegando nuevos moteros… Poco a poco, aquello iba acogiendo
cada vez más gente… Así que decidimos ir a por el almuerzo, antes que se creara
una de esas colas que tan poco nos gusta guardar, y por las que en más de una
ocasión hemos decidido almorzar en algún bareto cercano a la concentración de
turno.
Pedimos el famoso bocadillo motero de botifarra, una cañita, y nos fuimos a
sentar a una de las kilométricas mesas que había preparadas para que la peña
almorzara sentada y tranquila, en frente de un escenario el que todavía no
había nadie actuando.
Almorzamos relajadamente, charlando, y observando que ciertamente aquello
parecía que sí se iba animar. La gente acudía al encuentro, cada vez con más
ímpetu. Y lo que en un principio no era sino un deprimente panorama de
“pinchazo”, se iba convirtiendo en un encuentro motero en toda regla…. Desde la
mesa, descubrimos entre la multitud, un montón de caras conocidas. De viejos
amigos, y de conocidos variados… Vimos a Jorderic, de Wanderers MG Barcelona… a
un montón de representantes de Kataros MG… a varios de VOCS… Pero el tiempo no
solo no parecía mejorar, sino que poco a poco, cada vez hacía una temperatura
menos apetecible, y decidimos emigrar de allí a echar el cafelote en otro sitio
más…. digamos… resguardado…
Nos íbamos pues, no sin antes tirar los deshechos a la basura; y no sin antes
echar cuatro fotos más a las múltiples monturas que hasta allí llegaron durante
nuestro almuerzo…
Nos íbamos, pero antes pudimos saludar a varios conocidos… Pudimos saludar a
Nitro, a Lucas, a MªCarmen… de VOCS.
Pudimos saludar –cuando se iban también- a los amigos de Wanderers MG, Toni, Dani,
Rafa…. Que por lo visto marchaban a almorzar a un lugar más tranquilo. Ironías
de la vida, nosotros cuando llegamos encontramos el lugar más bien aburrido…
je, je, je….
Total, que arrancamos nuestras monturas, y salimos de allí sin un rumbo fijo al
que acudir. Aunque en la mente de todos, sonaban dos posibilidades bien
apetecibles:
La ruta fue algo rutinario. Tranquila, sin altibajos, y con muy buen ritmo….
Llegamos al bareto, aparcamos las monturas, y allí descubrimos la estupenda
Yamaha Midnight Star 1300, del compañero Nick…. Un enorme Británico, que acude
hasta allí con asiduidad a regalar el oído de los asistentes con su guitarra y
aterciopelada voz. Un cantante en toda regla, que no tardaría en coger la
sonanta y dedicarse a aquello que más le gusta aparte de rutear…
Nosotros, nos metimos para adentro, ordenamos nuestros bebercios… y al poco ya
estábamos deliberando si celebrar o no, una estupenda partidilla de dardos.
Decidimos que si, que la jugaríamos… y el compañero Jordi, nos metió una paliza
de tres pares de cojones…! Jué con el Tarraconense…!!
Decidimos que aquella iba a ser solo una partida de calentamiento, pero la
segunda partida –aunque el nivel general fue mejor que la primera- también tuvo
un final apabullante. Esta vez, por parte de Fredy….
Ahí, nuestro reencontrado amigo decidió marchar ya para su tierra… Abrazos, apretones
de manos… despedida cálida de nuestro compañero… Y decidimos seguir con los
dardos…
Todavía jugaríamos un par de partidas más, antes de sentarnos en una mesa a
conversar, beber zumito de cebada, y contemplar que el día se había arreglado y
el sol parecía que empezaba a calentar el ambiente y alegrar el espíritu de
cuantos por allí estábamos descansando las posaderas, refrescando el gaznate, y
compartiendo una estupenda mañana –mediodía ya- de domingo rutero…
Para entonces, Moli ya comentaba su intención de marchar para casa. Y a mí,
tampoco me desagradaba la idea de partir… Y el bueno de Fredy, valoraba la
posibilidad de quedarse allí a comer….
Y entre decidir una cosa u otra, el muy puñetero apareció con otra ronda de
cervezuelas… si será….
Así que las libamos con avidez, y antes que se lo pesara de nuevo y fuera a por
más, saltamos de las sillas, nos pusimos las chupas, asimos los cascos, y nos
dispusimos a salir de allí…
El amigo Fredy decidió no acompañarme esta vez, y acompañó a Moli hasta su pueblo.
Así haría unos kilometrejos más, y vayan vuestras mercedes a saber donde acabó
comiendo el amigo…
Total, que nos despedimos del compañero Nick, que a esa hora ya estaba cantando
alegre en la terraza, amenizando el vermouth a los demás clientes… Nos
despedimos entre nosotros….
Y partimos cada cual a su destino. Felices, de haber podido compartir una
estupenda –aunque algo atípica- mañana de domingo, motera, medio rutera,
almuercera…. Pero muy divertida. Y que –a la postre- nos había respetado
genialmente, pues no llovió ni una sola gota….
La verdad, aunque no fue como podíamos esperar que fuera… Fue una estupendísima
salida domincal….!
A ver si no tardamos mucho en celebrar otra, que mi culete ya desea sentir el
asfalto discurriendo bajo mi dulce, tierna y adorada Bilú It…..
NaClu2!!!!
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